Ethan Ayers está perdido y le pide ayuda a Ethan Slade. El joven Ethan acepta ayudarlo a llegar a donde quiere ir. En el camino, el joven Ethan comprende que el buen samaritano es el padre de uno de sus amigos de la escuela secundaria y, sin embargo, eso no le impide hacer todo lo posible para seducirlo.