Atlas Grant y T. Wilcox
Le pasa algo a un hombre cuando entra en un baño. Algo oscuro y primal se apodera y es más que la necesidad de descargar. Se trata de la urgencia de cazar y llevar a un hombre abajo, conseguirlo debajo de ti y tomarlo como una perra. No hay manera de hacerlo y no hay una manera agradable de decirlo... hombres: todos somos perros de mierda. Y mientras se deslizaba un hueso crudo en un agujero apretado, estamos felices. De eso se trata todo cuando golpeas el baño y encuentras una puta polla dispuesta. En Entourage, en Las Vegas, no es diferente para el gran y delicado tono muscular Atlas Grant y el gran cabrón fetiche peludo, T. Wilcox, que pone a Atlas a través de sus pasos, follando su cara y desnuda follando su agujero hasta que se sueltan con un potente jizz cremoso.