En el tranquilo sótano de un edificio fuera del negocio, Jax Dylan ha venido a esconderse. Este ha sido el lugar donde piensa profundamente, sin distracción. Pero en esta tarde cálida, otro comparte el aire con Jax. Un joven llamado Brandon Bronco se metió en el sótano por una ventana abierta. Planeó tomar una siesta entre sus clases en la universidad comunitaria, pero encontró algo mucho más emocionante que un espacio vacío.