Papá muy cariñoso - Curtis
Un niño necesita una pequeña disciplina, especialmente cuando no limpian sus habitaciones. Pero despertar mi hijastro, Curtis, fue más difícil de lo que pensaba. Cuando me devolví las portadas, todo lo que podía ver era su madera de la mañana atrapada en sus pantalones. Le pregunté por qué soñaba, sabiendo que era yo. No tomó mucho tiempo antes de que mis manos se metieran la polla. Tenía que tener mi boca en ella y bajar sus pantalones nocturnos. Sumé en su polla, sabiendo que quería más el mío, así que se lo di. Mi chico sabe cómo me gusta mi polla funcionó, y no decepcionó a papá en absoluto. Me sentí mejor cuando le cagué el culo. Me encanta cómo Cutis toma mi polla, y me aseguré de tratarla bien. Le perforaba el culo hasta que el esperma le arrancaba la polla, seguido de mi semilla fluyendo por su garganta.
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