Mientras algunos se están hundiendo, otros deben trabajar duro para satisfacer los deseos ardientes de los machos dominantes de la ciudad. El helicóptero nunca ha sido amable, y desde el momento en que esconde su identidad detrás de una capucha, emergen sus instintos más primitivos. Frente a él, su sumiso, dócil y listo para hacer cualquier cosa para complacer a su maestro, se esfuerza por seguir sus instrucciones a la carta, sabiendo que cada error puede conducir a consecuencias. El aire grueso, la tensión agitada, Chopper curva#39; su poder es innegable. El chupador, a pesar de la brutalidad del acto, encuentra satisfacción en su sumisión, ahogando en el placer masoquista de cada uno de los movimientos de Chopper Pul#39;s. Cada pulso de la polla dominante, cada gota de esperma es un recordatorio de que en este intercambio, sólo hay un rey.