Ducha vespertina
Mi momento favorito del día es cuando tengo mi tiempo a solas en la ducha. Me encanta estar desnudo y sentir el agua fría cayendo por mi cuerpo. Cuando el agua gotea sobre mí es como si decenas de dedos jugaran sobre mi piel. En mi cosa de Pekín y Shanghai, mientras actúo en el escenario, tengo a todos esos tíos tocándome y agarrándome por todas partes. Entonces se me puso dura de verdad. Empecé a jugar con mi culo y a pensar en aquel tipo que vino a verme. Me habría lamido el culo todo el día y toda la noche si se lo hubiera permitido. Me burlé tanto de él que le di tantas ganas de follarme.